¿Sabías que…hay un elemento que “sabe dónde vives”?

Bueno, aclaremos el asunto. Estos elementos no dicen dónde vives tu pero sí pueden determinar las migraciones que hicieron nuestros antepasados. La técnica en sí se basa en los mismos principios que la datación por 40K/40Ar (y que puedes leer en otro “sabías qué”): la desaparición de un isótopo concreto que se transforma en otro. En este caso el par importante es 86Sr /87Sr. Pero estos isótopos no se encuentran en la naturaleza como tales, sino que se originan de la descomposición del rubidio. Dependiendo de la geología característica de una zona, ratio de isótopos 87:86 presente en las rocas varía. ¿pero qué tiene que ver esto con los humanos? Pues que parte de esas rocas terminan en nuestra dieta, ya sea por el agua que ingerimos o por la que beben plantas y animales.

El estroncio puede sustituir al calcio del esmalte de los dientes durante la formación de estos. Así, durante nuestra infancia una pequeña cantidad de estroncio se fija en los dientes en crecimiento. Si un antropólogo mide la proporción entre los dos isótopos, puede saber en qué parte de la Tierra vivía esa persona al formarse los dientes. Dado que un adulto ya no se forma más dientes y, por tanto, no se absorbe más estroncio, analizando la proporción de estos isótopos de los dientes de un cadáver se puede saber en qué parte del mundo ha nacido y crecido el sujeto, incluso si lo hizo en lugares diferentes. Pero si ese sitio se encuentra lejos de su lugar de enterramiento implicaría que ha emigrado.