¿Sabías que…el aluminio fue considerado un metal precioso?

Sí, has leído bien. El aluminio. El mismo material con el que se hacen las latas de refrescos o el papel con el que envuelves el bocadillo. En realidad, este metal es el tercer elemento más común en la corteza terrestre, solo por detrás de del oxígeno y del silicio. Entonces, ¿cómo es que fue considerado un metal precioso, valiendo incluso más que el oro? Debido a los problemas que hubo para su extracción. Este metal es tremendamente raro encontrarlo a solo, y siempre aparece formando compuestos con otros elementos. Los primeros métodos de extracción requerían grandes cantidades de electricidad, algo no muy común en el siglo XIX. Tanto era así que Napoleón III decidió permitirse el lujo de mandar que le fabricaran poseer platos y cubiertos de aluminio. Si un monarca o un embajador extranjero era servido en una vajilla de oro, sabía que no contaba con el aprecio del emperador. Era todo un desprecio.